EL VAL D’ORCIA

EL VAL D’ORCIA

Una de las rutas indispensables cuando se piensa recorrer la Toscana es perderse por el Val d’Orcia. Un valle precioso que se encuentra situado al sur de la Toscana entre las provincias de Siena y Grosseto y que maravilla a quien lo descubre. Por todo ello, en 2004, fue seleccionado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

El Val d’Orcia lo conforman fundamentalmente 5 pueblos: Castiglione d’Orcia, Montalcino, Pienza, Radicofani y San Quirico d’Orcia; aunque también son interesantes de descubrir Bagni San Filippo, Bagno Vignoni, Contignano, Monticchielo, Rocca d’Orcia y Vivo d’Orcia.

CASTIGLIONI D’ORCIA. En mi ruta por la Toscana no me dio tiempo a incluirlo en mi recorrido pero no descarto volver una segunda vez con más intensidad y conocer mejor este valle. De esta localidad es el artista del S. XV Lorenzo di Pietro a quien la plaza principal, llamada Piazza Vecchietta, va dedicada. Si recorres Castiglione te encontrarás el palazzo comunale, la chiesa romanica de piedra de Santa Maria Maddalena y la chiesa dei santi Stefano y Degna, la más importante. También hay un museo, la Sala de Arte San Giovanni, ubicado en el antiguo Oratorio San Giovanni Battista con obras de Simene Martini, Lorenzo di Pietro (Il Vecchietta) y Giovanni di Paolo. No te olvides de la Rocca de Tentennano del S. XIII. También hay otra fortaleza, la Rocca Aldobrandesca.

MONTALCINO es de sobra conocido en el mundo enológico por su excelente Brunello. Pero esta localidad no es solo vino, es Val d’Orcia y es Toscana por lo que también es medieval y por ende, uno de los pueblos más bonitos de esta región. En un pequeño resumen diré que en tu visita no puede faltar la Fortezza di Montalcino, la piazza del Popolo con su palazzo dei Priori, la chiesa di Sant’Agostino, el Museo Cívico, el Duomo di San Salvatore y la chiesa della Madonna del Soccorso. A las afueras puedes acercarte a ver abadía románica de Sant’Antimo.

 

Si PIENZA fue construida como la «Ciudad ideal» del Renacimiento, puedes estar seguro de que no te va a decepcionar. Allí nació Eneas Silvio Piccolomini, el futuro Papa Pío II. Fue tal el amor que le tenía a su pueblo natal que lo remodificó completamente: para empezar le cambió el nombre que tenía, Corsignano, por el actual gracias a una Bula Papal. Y aunque no terminó de ver su obra culminada ya que murió joven, el diseñador y constructor al que encargó su sueño, Bernardo Rosselini, hizo un gran trabajo con el Duomo di Santa Maria Assunta, el palazzo Piccolomini, el Palazzo Comunale, el palazzo Borgia, y el Corso Rossellino, una calle que va desde Porta Murello o Porta al Prato hasta Porta Ciglio y los edificios palazzo Salomone Piccolomini, palazzo Ammannati, palazzo Jouffroy, palazzo Gonzaga Simonelli, el palazzo Cardenale Atrebatense y le Case Nuove, las casas nuevas que tuvo que construir para que viviesen los antiguos habitantes y cuyas casas tuvieron que ser derruidas para poder construir ese sueño. Otros edificios son la chiesa di San Francesco, el conservatorio de San Carlo y la Pieve di Corsignano donde fue bautizado el Papa.

 

RADICOFANI es otra de las localidades de la Val d’Orcia que me quedó por ver y que dejaré para una próxima vez. Esta localidad vio nacer a Ghino di Tacco, un personaje recordado como el Robin Hood de este valle y cuyo hogar no era nada más y nada menos que la Fortaleza (en la actualidad alberga el Museo del Torreón). Su estatua está situada en los jardines públicos. Aun con todo te dejo una lista con los edificios más importantes que te encontrarás allí: la chiesa di San Pietro del S. XIII, la chiesa di Sant’Agata, el palazzo Pretorio en cuya fachada hay escudos de armas esculpidos, el palazzo della Posta. Si está incluida en la Bandiera Arancione del Touring Club Italia por algo será. En los alrededores hay que destacar el Bosco Isabella un fascinante jardín definido como «romántico y exotérico» construido a finales del S. XIX en el que sobresale una pirámide de piedra.

SAN QUIRICO D’ORCIA lo usé como base para recorrer los alrededores y no pude quedar más satisfecha. Restaurantes increíbles y medianamente bien de precio aunque puedes tener problemas al mediodía ya que algunos solo abren para las cenas. En cuanto a edificios importantes destacan: la chiesa di San Francesco (a la que también se la llama Chiesa della Madonna), la Collegiata dei Santi Quirico e Giulitta y la chiesa de Santa Maria Assunta. No te puedes perder l’Horti Leonini y el Jardín de las Rosas. En los alrededores es imprescindible el Boschetto dei Cipressi, un conjunto de cipreses a los que se llega por un camino de piedras y donde es posible acercarse solo hasta 500 m pues se atraviesa una propiedad privada. La Cappella della Madonna di Vitaleta con más cipreses flanqueándola y que se encuentra a pie de la carretera que va de San Quirico a Pienza, la colina del Podere Belvedere y a 26 km la impresionante Abbazia di Monte Oliveto Maggiore.

 

Pero si no te quieres quedar solo en los más importantes te animo a descubrir el resto de los pueblos medievales que guarda la Toscana: Bagni di San Filippo, Bagno Vignoni, Campiglia d’Orcia, Contignano, Monte Oliveto Maggiore (hay una abadía o quizás es solo la abadía y se puede dar un salto desde Montalcino, esto lo tengo que mirar), Monticchielo, Rocca d’Orcia (plaza, castillo y restaurante con estrella Michelín) y Vivo d’Orcia.

BAGNI DI SAN FILIPPO son básicamente las termas gratuitas de aguas sulfurosas que están situadas cerca de la población y que cuenta con tan solo 91 habitantes. Ballena Bianca es el nombre que recibe la inmensa piedra calcárea donde se encuentran las termas.

BAGNO VIGNONI sobresale por su inmensa plaza cubierta por una piscina termal en la que no puedes bañarte. La población dispone de diversos restaurantes con vistas espectaculares y diferentes parkings de pago; dispone también de varias instalaciones y hoteles donde sí es posible tomar los baños.

 

CAMPIGLIA D’ORCIA es un pequeño pueblo fracción de Castiglione d’Orcia y está situado a 800 msnm. En él podrás ver la chiesa di San Biagio consagrada en 1648 y reconstruida en 1795 y las ruinas del Castello di Campigliola o también llamada Rocca Visconti, que es la familia que dominó la zona en el S. XII. Hay una torre en la cima del monte desde la que puede verse toda la Val d’Orcia; aunque de las murallas que hubo en su día no queda nada, sí está la Porta Sud. Destaca la «Festa del Marrone» el último domingo de octubre.

CONTIGNANO es una pequeña fracción de Radicofani. Destaca la Torre del Cassero, una plaza con un pozo en medio y un palacio nobiliario además de la chiesa di Santa Maria Assunta y la Cappella di San Rocco. Existen dos puertas que dan acceso al castillo, una junta al Cassero y la otra a la que llaman Porticciola, en el muro norte. En Navidad hacen un Pesebre Vivente, en julio una fiesta medieval y en agosto destaca la Sagra del raviolo.

MONTICCHIELLO es un pequeño pueblo de origen medieval perteneciente a Pienza. Destaca la muralla, de la que se conservan todavía siete torres y la porta Sant’Agata. La Torre del Cassero es lo que queda de lo que fue el castillo construido en el S. XIII, época de máximo esplendor y que duró hasta el S. XVI. Dignas de admirar son también la pieve dei Santi Leonardo e Cristoforo de la segunda mitad del S. XIII con estilo románico-gótico y la pieve di Santa Maria dello Spino, reconstruida por la familia Saracini en 1570. El Teatro Povero es un espectáculo digno de ver fundado en 1967 que se organiza cada verano por los habitantes del pueblo, que son autores, actores, directores… No olvides acercarte a la carretera de los cipreses, de 1 km de longitud, con forma de serpiente que encontrarás en dirección a Montepulciano.

ROCCA D’ORCIA es un pequeño pueblo medieval a tan solo 1 km de Castiglione d’Orcia a quien pertenece y cuyos orígenes fueron etruscos. De gran importancia están los restos de la Rocca Tentennano construida entre los S. XI y XII por la familia Aldobrandeschi que fue un centro de control de la Via Francigena, una ruta que conectaba Canterbury con Roma. Sube a la parte más alta de la torre para contemplar las impresionantes vistas de la Val d’Orcia. En el mismo pueblo destaca la piazza della Cisterna y la chiesa di San Simeone. Y, como en todo pueblo medieval, piérdete por sus calles por las que parece no haber pasado el tiempo.

En el pueblo de VIVO D’ORCIA, gracias a sus maravillosas cascadas se pudieron construir molinos, herrería y lugares dedicados para la madera y el aprovechamiento del agua tan pura que descendía por la colina; hoy están abandonados. Incluso una central hidroeléctrica en el año 1920. Siena también aprovechó este agua y entre finales del S. XIX y principios del S. XX construyó un acueducto para llevarla hasta la ciudad. Destacan el Eremo Camaldolese del Vivo fundado alrededor del año 1000, la chiesa di San Marcello del S. XII que presenta influencias de arte románico y lombardo. Hay también un Oratorio dedicado a San Bartolomeo. El palazzo Cervini fue regalado al Cardenal Marcello Cervino por el Papa.

Para terminar y a modo de resumen, te diré que esta zona de cipreses mires por donde mires, además de la vista también podrás deleitarte el estógamo con el queso Pecorino de Pienza acompañado de un buen Brunello de Montalcino y unos sabrosos Picci con cualquier tipo de salsa.

Y ahora solo te deseo que disfrutes de la Val d’Orcia, de la Toscana y, en general, de toda Italia, porque es única.

SAN GIMIGNANO, LA MANHATTAN MEDIEVAL

SAN GIMIGNANO, LA MANHATTAN MEDIEVAL

San Gimignano es uno de los pueblos más bonitos de la Toscana y es uno de los que no te puedes perder en tu ruta por esta maravillosa región.

Presentar San Gimignano es fácil y te conquista al primer vistazo. Es un pueblo de aire medieval con la peculiaridad de ofrecer un Skyline de 13 torres imposible de olvidar. ¡¡Y llegó a tener hasta 72!! Por algo es conocido como la Manhattan medieval. Y no es para menos. Su belleza es tal que en 1990 fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

Vista de las torres medievales

Este pueblo de orígenes etruscos, tuvo su máximo esplendor en la Edad Media, concretamente en el S. XII, al ser un importante lugar de paso de la Via Francigena, una ruta que unía Canterbury con Roma. Pero la llegada de la Peste Negra tuvo sus consecuencias en la localidad perdiendo su influencia y su poder.

 

Son dos las plazas importantes de San Gimignano: Piazza del Duomo y Piazza della Cisterna; aunque a estas dos se pueden añadir estas otras: Piazza dell’Erbe y Piazza Pecori.

Piazza del Duomo. En la plaza del Duomo nos encontramos, obviamente, la catedral de Santa Maria Assunta, la oficina de Turismo, el Palazzo Comunale (llamado también del Popolo) con la Torre Grossa y la Pinacoteca, el Palazzo Vecchio del Podestà (y su torre Rognosa).

PIazza del Duomo

Duomo di Santa Maria Assunta. La catedral fue construida en el año 1056 y consagrada en 1148. Destaca su fachada románica de mármol travertino con un rosetón central. En su interior hay frescos del S. XIV. Si solo quieres visitar su interior, la entrada cuesta 4€ pero por 6€ puedes entrar también en el Museo de Arte Sacro. Algo que no debe faltar en la visita es contemplar la Capilla de Santa Fina. Esta santa es la más venerada de San Gimignano; la leyenda cuenta que cuando la santa murió, en la tabla donde había estado postrada los últimos años, florecieron violetas amarillas. Cada año, en marzo, «las violetas de Santa Fina», recordando aquel momento, florecen entre las piedras de las torres de San Gimignano.

Duomo di Santa Maria Assunta

Oficina de Turismo. San Gimignano Pass. Por 13 € tienes la oportunidad de entrar en todos los museos, torres y palacios donde está permitida la entrada: Museos Cívicos del Palazzo Comunale, la Pinacoteca y la Torre Grossa; chiesa di San Lorenzo in Ponte; Duomo di Santa Maria Assunta y Museo de Arte Sacro; Museo Arqueológico, Pinacoteca y galería de arte moderno y contemporáneo. Además puedes aprovecharlo durante dos días. Para más información consulta aquí la disponibilidad.

Palazzo Comunale o Palazzo del Popolo. Fue construido a finales del S. XIII. En la primera planta se encuentra la Sala Dante como recuerdo de su visita en 1299. En el segundo piso está la Camera del Podestà. La Pinacoteca contiene varios frescos de los Ss. XIII y XV. También se puede subir a la Torre Grossa de 54 m, construida en 1311 con unas fantásticas vistas del casco antiguo y del entorno. En 1255 salió una ley que prohibía a las familias que construyesen torre más altas que esta. Así que muchas debieron rebajarse para así cumplir dicha ley.

Palazzo del Popolo

Palazzo Vecchio del Podestà. El palacio se ve en la distancia gracias a su torre llamada Torre Rognosa de 51 m de altura.

Torre Rognosa

Piazza della Cisterna. Si hay algo que la distingue entre las demás, y de ahí deriva su nombre, es de su pozo octogonal, de finales del S. XIII. Es un aljibe encargado de abastecer de agua a la población sobre todo en épocas de asedio.

Durante el S. XIII la plaza se usó como mercado y escenario para fiestas y torneos. Los edificios que la rodean son: Palazzo Razzi (que es la Sede de un banco), Casa Silvestrini (era antiguo hospital para peregrinos de la via Francigena), Palazzo Tortoli (un edificio del S. XIII), Palazzo dei Cortesi y la Torre Pellari además de torres medievales como las gemelas Torri degli Ardinghelli (que se construyó a finales del S. XIII), la Torre Becci, Torre Cugnanesi y la Torre del Diavolo (la leyenda dice que, al llegar el dueño de la vivienda y verla, le pareció que era más alta de lo que tenía que ser y por ese motivo se dijo que solo podía haberlo hecho el mismo Satanás). A la plaza se entra a través del Arco dei Becci, antigua puerta de acceso a la ciudad por el primer círculo de murallas defensivas dicho arco forma parte de la muralla del S. X.

Piazza della Cisterna
Aljibe de la Piazza della Cisterna

Piazza delle Erbe. Era el lugar donde se hacía el mercado de productos frescos y que todavía se sigue manteniendo. Allí se encuentra las torres gemelas que formaban parte del Palazzo de los Ghibelllini Salvucci.

Piazza dell’Erbe e Torri Gemelli

Un pueblo de la Edad Media no podía resistir sin una muralla medieval. La primera se levantó en el año 988 y fue reconstruida en el S. XIII. Tenía cinco puertas: Porta di San Giovanni (1262) que tiene un pequeño campanario con la Madonna dei Lumi, Porta di San Matteo, Porta Quercecchio, Porta San Jacopo y Porta delle Fonti.

Porta San Giovanni

Rocca di Montestaffoli. Solo quedan los restos de lo que fue antiguamente la fortaleza construida en el S. XIV. Si subes a la única torre que se mantiene en pie, tendrás unas magníficas vistas del centro histórico. Construida para defender San Gimignano de los ataques de Siena tras pertenecer a Florencia. El tercer fin de semana de junio, se celebra aquí mismo la Giostra dei Bastoni.

Chiesa di Sant’Agostino. Es la segunda iglesia más grande de San Gimignano. Se construyó en 1280 y fue terminada en 1298. Consta de arquitectura románica y gótica con ventanas de arco trilobulado y un claustro agustino que data del S. XV. Sencilla por fuera pero su interior esconde una joya: un ciclo de frescos de diecisiete paneles de La vida de San Agustín pintados por Benozzo Gozzoli que están situados en el altar mayor. La entrada es gratuita.

Chiesa románica de San Lorenzo in Ponte. Fue construida en el S. XIII. Tiene frescos del S. XV y desde principios del S. XIV, un pequeño pórtico los protege.

Chiesa di San Bartolo. Es una iglesia románica del S. XIII.

Portada románica de la que fue la chiesa di San Francesco, edificio de inicios del S. XIII.

Portada della Chiesa di San Francesco

El Polo Museale Santa Chiara agrupa tres museos más. El Museo Arqueológico, con restos etruscos, romanos y medievales. La Spezieria di Santa Fina con recipientes de farmacia de los Ss. XV al XVIII del antiguo hospital. La Galería de Arte Moderno y Contemporáneo Raffaele de Grada, con obras del S. XX (mira por la ventana y descubrirás unas vistas increíbles al casco histórico). Entran también dentro de la San Gimignano Pass.

Otros museos a visitar si todavía tienes tiempo son: el Museo del Vino e della Vernaccia y el Museo San Gimignano 1300, una reconstrucción hecha en cerámica de San Gimignano tal como era en los Ss. XIII y XIV. Museo de la Tortura, que tiene dos locales: uno en Porta San Giovanni y el otro cerca de la Piazza della Cisterna.

Otra de las cosas que no te puedes perder es acercarte a las Fonti Medievali. Eran cisternas de principios del S. XIII que recogían el agua de las lluvias. Se sitúan fuera de las murallas y hay una fuerte pendiente para bajar hasta ellas.

 

Recomendaciones para fotografiar: cualquier calle, cualquier rincón, son dignos de una parada para admirar cada metro cuadrado de San Gimignano. No logré encontrar el lugar exacto desde donde se ve en la lejanía el Skyline típico con las torres medievales intentando tocar el cielo. Me quedó pendiente para una segunda vez en el que pueda paladear cada segundo que esté allí.

Recomendaciones para comer: Gelateria Dondoli. Se dice que sus helados son lo mejor que han probado en sus vidas, yo no llegué a probarlo. Y, en cuanto a beber, prueba el vino Vernaccia que se hace en el mismo San Gimignano. No me quedé allí a comer por lo que no puedo recomendar ningún restaurante en particular. La próxima vez prometo hablar más sobre este tema.

Recomendaciones para dormir: San Gimignano fue una parada de paso para ir desde nuestro alojamiento en San Quirico d’Orcia hasta el siguiente destino, La Terraza que estaba en un pueblo pequeño llamado Palaia, a una hora de Pisa y a otra hora de Lucca.

Recomendaciones de eventos: El tercer fin de semana de junio, se celebra en la Rocca di Montestaffoli la Giostra dei Bastoni.

Recomendaciones para aparcar: Todo San Gimignano es ZTL, o sea, Zona de Tráfico Limitado, por lo que solo pueden entrar en el casco histórico los residentes. Con la masificación turística que existe en la localidad, sobre todo en temporada alta, hay que tener muy en cuenta con llegar lo antes posible para no encontrar una excesiva cantidad de coches intentando aparcar. Existen varios parking para tal fin fuera de la muralla.

Recomendaciones para visitar en los alrededores: Florencia, Siena, Monteriggioni, Volterra.

PIENZA, LA CIUDAD IDEAL

PIENZA, LA CIUDAD IDEAL

La historia de Pienza se inicia con el nacimiento de Enea Silvio Piccolomini en el pueblo de Corsignano. Con el tiempo, este hombre se convirtió en el Papa Pío II; el cual tenía un sueño: darle a su pueblo el lugar que se merecía en el mundo y convertirlo en la «ciudad ideal» del Renacimiento. Para ello, usando una bula papal le cambió su nombre original por el de Pienza; además tuvo que pedir ayuda a Bernardo Rossellino para que diseñase y construyese la nueva ciudad. Así nació Pienza. Rossellino hizo tan buen trabajo que en el año 1996, Pienza se convirtió en Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Pero eso no es todo, ya que en el año 2004 se añadió también todo el increíble Val d’Orcia en la lista de los Paisajes Culturales Mundiales de la Unesco.

Si de algo he hablarte en primer lugar, es de la plaza más importante de Pienza: Piazza Pío II. Su forma es trapezoidal, el suelo está formado por ladrillos dispuestos en forma de espiga y tiene un pozo central (de 1462) también llamado Fontana del Palazzo Piccolomini. Está rodeada por el Duomo di Santa Maria Assunta, el palazzo Piccolomini, el palazzo comunale y el palazzo Borgia. Aquí se celebra el primer domingo de septiembre, el famoso Palio de Caccia del que te hablaré al final de la página.

Duomo di Santa Maria Assunta. La catedral es de estilo renacentista, la fachada se divide en dos áreas: abajo tres puertas y arriba tres arcos sobre columnas. En él se guardan polípticos de la escuela gótica de Siena. Está construida sobre los restos de la iglesia románica de Santa María que aún están visibles en la cripta también hay una pila bautismal que fue realizada por Rossellino. En la parte izquierda se levanta la torre del campanario que es octogonal. Desde la cripta se puede acceder al «laberinto de la catedral», un sistema de galerías de drenaje excavadas bajo el ábside para frenar sus problemas de hundimiento.

Duomo di Santa Maria Assunta
Duomo di Santa Maria Assunta

Palazzo Comunale o también llamado Pubblico. Posee una gran loggia en la planta baja. Está formado por un pórtico de tres arcos que descansan sobre columnas jónicas. En la parte superior destacan cuatro ventanas geminadas. Tiene una torre del reloj, más baja que la de la catedral, que finaliza con almenas. En este encontrarás la Oficina de Turismo.

Palazzo Comunale

El palazzo Piccolomini fue la residencia del Papa Pío II y su familia. Posee un patio porticado y un jardín colgante renacentista con vistas al Val d’Orcia. El interior alberga un museo con una sala de armas, el dormitorio del Papa, la biblioteca y las medallas de Pío II y Pío III. Está lleno de muebles antiguos, algunos de los Ss. XV y XVI, pero no conserva la decoración original de la época. Podrás verlo por 7 €.

Palazzo Piccolomini

El palazzo Borgia se sitúa frente al palazzo Piccolomini y fue donado por el Papa Pío II al cardenal Rodrigo Borgia, que sería el futuro Papa Alejandro VI. Es sede del Museo Diocesano. Exhibe obras textiles locales así como objetos religiosos.

Corso Rossellino es la calle principal de Pienza y está dedicada a la persona que diseñó y construyó el sueño de la «Ciudad Ideal». Se encuentra entre la Porta Murello (o Porta al Prato) y la Porta Ciglio. En esta calle hay otros palacios importantes que se hicieron en la época que se construyó la ciudad, como: palazzo Salomone Piccolomini, palazzo Ammannati, palazzo Jouffroy, palazzo Gonzaga Simonelli (tiene un jardín colgante que da a la Val d’Orcia), palazzo Cardenale Atrebatense. Además está llena de tiendas de artesanía, negocios y locales donde probar los productos típicos.

Porta Murello o Porta al Prato
Corso Rossellino

Pero claro, no todo fue bueno… Al querer modificar todo el pueblo de Corsignano para adecuarlo a la nueva Pienza, había casas que ya estaban allí donde se querían construir los nuevos palacios y edificios del renacimiento. Así que Corsignano tuvo su parte buena y su parte mala… Se demolieron las casas allí edificadas y se hicieron 12 casas nuevas (Case Nuove), todas iguales: de piedra y con una puerta de acceso elevada por unos escalones, en una calle paralela a todos los grandes palacios de Corso Rossellino. Ahora es una calle preciosa llena de plantas y flores que cuelgan de las paredes.

Otros edificios que merece la pena ser nombrados y vistos son: la chiesa di San Francesco, de estilo gótico de finales del S. XIII en cuyo interior hay restos de frescos del S. XIV; el conservatorio de San Carlo, que es una antigua fortaleza medieval que fue convertida en instituto religioso y hoy es el museo arqueológico; y la pieve di Corsignano, la iglesia románica donde fue bautizado Enea Silvio Piccolomini y que está dedicada a los santos Vito y Modesto, de aproximadamente el S. XI y cuyo campanario es cilíndrico.

Y después de esto, piérdete por sus calles y descubre rincones increíbles que la hacen ser uno de los pueblos más bonitos de la Toscana ¿quizás el más bonito? Observa detenidamente el nombre de sus calles para no perderte estas dos en especial.

 

Un dato curioso: ¿Sabéis que en la Toscana se rodaron decenas de películas? Gladiator, el paciente inglés, el sueño de una noche de verano, bajo el sol de la Toscana, Romeo y Julieta del año 1968, o la mini serie de los Medici Masters of Florence incluso dentro del mismo palazzo Piccolomini una italiana llamada l’arcidiavolo.

 

Recomendaciones para fotografiar: como he dicho más arriba, piérdete en sus calles y saborea la Pienza más auténtica. Disfrutarás de vistas como estas…

 

Recomendaciones de eventos: desde 1960, durante el primer domingo de septiembre se lleva a cabo el Palio del caccio al fuso en la plaza principal. Es una competición para ver quién acerca rodando un queso a un punto concéntrico que hace a la vez de diana. Es acompañado de degustación del queso Pecorino y actividades del folclore toscano.

Recomendaciones para comer: sin lugar a duda Bistrot Fidelio que está justo antes de cruzar Porta al Prato y descubrir Pienza. Vistas preciosas y comida buenísima como en toda la Toscana.

Recomendaciones para dormir: no me alojé en Pienza, pero a 10’2 km se encuentra San Quirico d’Orcia que es una base perfecta para descansar y descubrir durante varios días el Val d’Orcia.

Recomendaciones para aparcar: llegué a Pienza a la hora de comer tras recorrer Bagno Vignoni y Montepulciano con lo cual tuve problemas para encontrar un hueco. Tras varias vueltas, lo dejé a las afueras en un parking de piedras. Lo bueno es que era gratis… Todos estos pueblos tan llenos de turistas es mejor llegar cuanto antes, mejor aunque a veces es difícil si te pasa como a mí que quiero ver todo en poco tiempo…

Recomendaciones para visitar en los alrededores: monasterio de Sant’Anna in Camprena, que se eligió como escenografía de la película «El Paciente Inglés»; la capilla de la Virgen de Vitaleta, muy cerca ya de San Quirico, está enmarcada por dos hileras de cipreses; el Castello di Cosona del S. XV que posee una torre de forma cuadrada y un pozo cisterna construido en el 1659 para la recolección del agua; el Castello di Spedaletto, un complejo fortificado situado a unos minutos de Pienza y que pertenecía al Hospital de Santa María della Scala en Siena; el palazzo Massaini que fue construido en el S. XVI y está ubicado en una colina a las afueras de la ciudad, construido sobre un edificio de origen medieval de los Cacciaconti; Bagno Vignoni y su plaza que fue una antigua terma; Monticchiello.

BAGNO VIGNONI, UN PEQUEÑO PUEBLO TOSCANO CUYA PLAZA ES UNA AUTÉNTICA FUENTE TERMAL DE ORIGEN ROMANO

BAGNO VIGNONI, UN PEQUEÑO PUEBLO TOSCANO CUYA PLAZA ES UNA AUTÉNTICA FUENTE TERMAL DE ORIGEN ROMANO

Si hay un pueblo medieval pequeño y con mucho encanto, ese es Bagno Vignoni. Se encuentra a escasos 6 km de San Quirico, en pleno Val d’Orcia. Lo tiene todo: paseo por sus calles, termas en sus cercanías y belleza se mire por donde se mire.

Es pequeño y en poco tiempo se recorre. Pero… Y aquí está su mayor atractivo… ¿en qué pueblo has visto que su plaza principal sea una bañera termal? El interior del cercano Monte Amiata calienta las aguas que surgen en la misma fuente y mantienen su temperatura diaria a 50º. Se trata de una piscina de 49 m de largo y 29 m de ancho de origen romano y que en la época medieval comenzó a hacerse famosa gracias a la Via Francigena que pasa por aquí. Sus aguas son canalizadas y llevadas a los centros termales próximos. Pero tengo que darte una mala noticia… Y es que en esta plaza está prohibido bañarse. La buena es que también disponen en las cercanías de unas termas gratuitas dirigidas por el ayuntamiento: el Parco dei Mulini; aunque si quieres disfrutar de sus terapias termales (baños de barro y diferentes tipos de masajes) sí tendrás que pagarlas.

En la misma plaza se encuentra, casi pasando desapercibida, la chiesa di San Giovanne Battista.

Chiesa di San Giovanne Battista

Recomendaciones para fotografiar: aparte de que la plaza en sí misma ya es una belleza, existen maravillosos rincones que descubres cuando callejeas por el pequeño borgo.

Recomendaciones para comer: rodeando la misma plaza existen varias cafeterías y restaurantes donde picar o comer algo. Por ejemplo en La Terraza Restaurante.

Recomendaciones para dormir: como alojamientos existen varios al que puedes acompañar con opciones de spa. Si no te interesa quedarte aquí, te invito a pasarte por San Quirico.

Recomendaciones para aparcar: existen amplios parkings de monedas a la entrada del pueblo. Si estás solo de visita, en un par de horas te ha dado tiempo de recorrerlo e incluso de tomar algo en alguna de sus terrazas pudiendo contemplar la belleza de la terma romana y sus reflejos.

Recomendaciones para visitar en los alrededores: esta vez no puedo recomendar uno, dos o tres pueblos cercanos pues, estando en el Val d’Orcia, y si se dispone del tiempo necesario, el mismo valle vale la pena recorrerlo de principio a fin.

MONTALCINO, LA CUNA DEL BRUNELLO

MONTALCINO, LA CUNA DEL BRUNELLO

Si se habla de Montalcino, a los amantes del buen vino les vendrá a la mente el inigualable Brunello di Montalcino. Y es que a esta pequeña población de 5000 habitantes, se la conoce por esta apreciada bebida, por los paisajes que la rodean en pleno valle del Orcia y, por ende, por estar en unas de las regiones más bonitas de Italia: La Toscana.

Como historia, recordar tan solo que casi toda esta zona tiene orígenes etruscos. Y añadir que Montalcino fue libre hasta que Siena la incluyó dentro de sus posesiones en el S. XIII.

La Fortezza de Montalcino, a la que también se le denomina La Rocca, es un edificio pentagonal que fue construido por los sieneses en 1361. Este castillo está situado en la parte más alta del pueblo y subir a las murallas proporciona una de las mejores vistas de toda la población.

Los sieneses construyeron la muralla junto con la Fortaleza para defender el pueblo de sus enemigos. El acceso al patio (escenario de eventos deportivos y culturales) es gratuito pero hay que pagar para subir a las murallas y descubrir sus puertas: Gattoli, Cerbaia y Burelli. Los mayores de 14 años pagan 4€; entre 5 y 14 años, son 2€: y los menores de 5, gratis.

De camino al centro de Montalcino y pasando por la Piazza Garibaldi, te encontrarás con la chiesa di Sant’Egidio reconstruida con estilo gótico pero a partir de una base románica.

Chiesa di Sant’Egidio

Una de las zonas más importantes de Montalcino es la Piazza del Popolo. En el centro se sitúa il Palazzo dei Priori (S. XIII-XIV) que alberga el ayuntamiento. Podrás ver los numeroso escudos que pertenecieron a los diferentes Podestà que gobernaron la ciudad. A su lado se eleva il Cappanone, cuya campana todavía sigue sonando.

Palazzo dei Priori
Interior Patio Palazzo dei Priori

Justo al lado del Palazzo dei Priori, se sitúa la loggia, que es porticada, de estilo gótico del S. XIV. Tiene seis arcos de medio punto.

Loggia Porticada
Interior de la Loggia Porticada. Monumenti ai Caduti

En la via Cialdini y paralela al Palazzo dei Priori te encontrarás con la Chiesa di Sant’Agostino, que tiene fachada románica y fue construida en el S. XIII.

Chiesa di Sant’Agostino

El Museo Cívico de Montalcino está caracterizado por contener dos museos en uno (diocesano y cívico) y por ello recibe el nombre de Musei Riuniti. Se sitúan en el antiguo convento de San Agustín.

Duomo di San Salvador se sitúa a la altura de la Piazza del Popolo pero hacia las afueras. Es de estilo neoclásico; construido en el S. XIV y reconstruido en el S. XVIII. La entrada es un pórtico con seis columnas y su interior alberga una pila bautismal Travertina que, aunque no es demasiado antigua, sí que es muy curiosa.

Chiesa della Madonna del Soccorso, reúne varios estilos: renacentista, interiores barrocos y fachada neoclásica. La iglesia, consagrada en 1330, se construyó en el lugar donde hubo una capilla adosada a la muralla que tenía un fresco de la Virgen con el Niño. En 1555 se cambió el nombre al actual tras vencer una batalla contra los españoles.

Si te gusta el vino, no te puedes perder hacer una visita a una de sus numerosas bodegas.

Recomendaciones para fotografiar: este es otro de esos pueblos en los que hay pasear despacio y no perderte un detalle de cada rincón o callejón que te encuentres.

Recomendaciones para comer: existen dos sitios por los que merece la pena, al menos, darse un respiro mientras se disfruta de la paz de Montalcino. Y esos lugares son: Caffe Fiaschetteria Italiana y el Ristorante Il Giardino.

Recomendaciones para dormir: Montalcino es lo suficientemente grande como para reunir diferentes tipos de alojamientos aunque yo me quedé durante varios días en San Quirico d’Orcia.

Recomendaciones para aparcar: yo aparqué en Parcheggio di Via Gobietti y, aunque es gratuito y podría decirse que vale la pena, hay una pendiente importante desde la Fortezza para llegar hasta allí. Hay varios parking, dos de ellos situados muy cerca de la Fortaleza (Piazzale Fortezza y otro sin nombre; este último dicen que se paga una parte como zona azul con sitios estrechos y más adelante es gratuito). Pero o se llenan pronto, o hay que tener en cuenta la hora para regresar a ellos.

Recomendaciones para visitar en los alrededores: muy cerca de Montalcino se encuentra la Abadía Benedictina de Sant’Antimo, en la fracción de Castelnuovo del Abate; e, indudablemente, toda la zona del Valle del Orcia (San Quirico, Bagno Vignoni, Montepulciano, Buonconvento…)

MONTEPULCIANO

MONTEPULCIANO

Montepulciano se encuentra situado en una colina a 600 msnm.

Cuenta en sus orígenes con etruscos y romanos antiguos; aunque lo que más sobresale de esta pequeña ciudad, es el florecimiento del Renacimiento durante el S. XVI gracias a la familia Medici y por ello se la llama como «La Perla del Cinquecento».

Si hay un lugar que destaca no solo por formar parte del centro histórico si no por la cantidad de edificios que lo bordean, es la Piazza Grande. En ella se sitúan el Duomo y el Palazzo Comunale, además de diversos palacios medievales o renacentistas como el Palazzo Contucci, el Palazzo Tarugi o el Palazzo del Capitano. Hay que destacar también el Pozo de los Grifos y de los Leones, una obra de 1520 diseñada por Sangallo el Viejo.

Piazza Grande

Como curiosidad, decir que gran parte de las escenas de la película Luna Nueva de la Saga Crepúsculo, fueron grabadas en esta plaza. En dicho film, aparecía una fuente que no está allí sino que tuvieron que construirla con madera y papel maché.

El Duomo es conocido también como la Catedral de Santa Maria Assunta. Fue construido entre 1570 y 1680 aproximadamente aunque su fachada no está terminada. El campanario anexo formaba parte de una iglesia anterior. En su interior destaca el monumento funerario de Bartolomeo Aragazzi del S. XV en mármol de Carrara. Alberga el famoso tríptico de la Asunción de la Virgen del s. XV. La entrada es gratis.

Duomo di Santa Maria Assunta
Duomo di Santa Maria Assunta

El Palazzo Comunale es de estilo gótico del S. XIII y fue renovado en el S. XV. Es muy parecido al Palazzo Vecchio de Florencia. Desde su terraza se obtiene una gran panorámica: Monte Amiata, Siena, la Val d’Orcia, Pienza, el lago Trasimeno. La entrada son 5€ pero si solo quieres subir a la terraza, deberás pagar solo 2’5€.

Palazzo Comunale
A la izquierda el Palazzo Capitano del Popolo

Además del Duomo, el resto de iglesias que hay en Montepulciano son: chiesa di Sant’Agnese, chiesa di Sant’Agostino y, aunque se encuentra a las afueras del casco histórico, destaca también el Templo di San Biagio.

La chiesa di Sant’Agnese fue construida en 1306 junto con el monasterio contiguo y remodelada en el S. XVII. En ella se guarda el cuerpo de la santa cuya proclamación fue hecha en 1726 además de frescos del S. XIV. Sant’Agnese es la patrona de la ciudad.

Chiesa di Sant’Agnese

La chiesa di Sant’Agostino tiene fachada renacentista. Su portada está muy elaborada y en el tímpano destacan tres figuras de terracota. Fue fundada en 1285 y reconstruida en el S. XV. También sufrió una restauración entre los años 1784 y 1791 que modificaron su planta original.

Chiesa di Sant’Agostino

Y no hay que olvidarse del más importante, el templo di Biagio al que llaman «La Perla del Cinquecento». Está realizado con mármol blanco travertino. Es de estilo renacentista con un campanario de varios niveles y un pozo lateral. Fue construido entre 1518 y 1545, en pleno S. XVI, de ahí su nombre. En el interior, en los nichos, hay estatuas de santos. Fue diseñado como un templo antiguo. La entrada cuesta 3’5€. A su lado se encuentra la Canonica de San Biagio.

Los palacios que destacan en Montepulciano son el Palazzo Bruschi y el Palazzo Bucelli.

El Palazzo Bruschi es importante ya que desde el S. XIX, alberga el Caffè Poliziano que era el lugar de encuentro de artistas y personajes ilustres como Carducci, Pirandello, Mario Monicelli y Federico Fellini.

El Palazzo Bucelli tiene inscripciones etruscas y latinas y en su fachada hay relieves y urnas funerarias etruscas.

Otros palacios interesantes para contemplar son: Palazzo Coccani, Palazzo Cervini, Palazzo Grugni, Palazzo Nobili-Tarugi (su fachada recubierta de mármol travertino), Palazzo Ricci, Palazzo Neri Orselli (fue construido en el S. XIV; tiene relieves de terracota y pinturas de la época renacentista y además es la Sede actual del Museo Civico que alberga más de 200 obras maestras).

Palazzo Nobili Tarugi

Otros edificios importantes de Montepulciano son la Torre del Pulcinella que es conocida como la Torre del reloj. La parte superior está decorada con un Pulcinella que toca la campana cada hora.

No nos podemos olvidar tampoco de la Fortalezza de Montepulciano que data de 1261 y fue construida por los sieneses tras la victoria contra los florentinos. Fue reconstruida varias veces. Actualmente es un centro cultural que acoge exposiciones, conferencias e iniciativas culturales.

El Museo de la Tortura exhibe una colección privada de herramientas para causar dolor en la Edad Media y el Renacimiento. También hay en Siena, San Gimignano, Lucca y Volterra. La entrada cuesta 8€.

Museo delle Torture

Porta al Prato (o Porta Gracciano). Origen medieval y transformada en 1511 y es el acceso principal a la ciudad y en su interior hay una tienda de vinos.. Fue restaurada en 1956 como consecuencia de la Segunda Guerra Mundial. Está adornada con el león de Florencia y el emblema de la Toscana.

Porta al Prato

La Colonna di Marzocco es una columna de mármol con el león heráldico de Florencia.

Colonna di Marzocco

Bodegas históricas de vino. Esta región es muy rica en vinos y Montepulciano no podía ser menos. En esta tierra se producen: DOCG «Nobile» desde 1981, DOC Rosso di Montepulciano, Vin Santo, Chianti Colli Senesi y Bianco Vergine Val di Chiana. Y en cuanto a las bodegas que se dedican a producirlo, debes saber que las más importantes son: Ercolani y De Ricci (es una bodega etrusca subterránea del S. XIV) sobre todo. Pero además están también la Bodega Contucci ubicada dentro del Palazzo Contucci (un edificio de 400 años de antigüedad que lo produce desde mediados del S. XVII y que se encuentra en la Piazza Grande. Junto a la Bodega Talosa y la Bodega del Redi.

Palazzo Contucci. Dentro las Bodegas Contucci

Recomendaciones para fotografiar: adéntrate en las calles laterales para descubrir rincones maravillosos que fotografiar. Destacan los miradores de la Piazza San Francesco y Belvederi. Y, hacia el pueblo, mirador de la carretera SP146 en dirección a Chianciano, en la Porta al Prato, en el Caffè Poliziano hay una terraza con vistas, en el Mirador del ayuntamiento, y en el Mirador Crete Senesi Panoramic Point.

Recomendaciones de eventos: Bravio delle Botti se celebra en agosto. Consiste en una carrera por parejas en las que se compite para ver quién lleva antes un tonel a la meta que es la Piazza Grande (todo la carrera cuesta arriba). Cada una de las parejas vive en cada uno de los barrios de Montepulciano y van vestidos con ropas medievales. También ponen un Mercado Navideño entre noviembre y enero en Piazza Grande.

Recomendaciones para comer: Lamentablemente no paré aquí a comer ni a picar algo entre horas pues todavía tenía que hacer otras paradas en el camino, por lo que no puedo sugerir ningún restaurante, pero sí lugares que pueden ser la delicia de las vistas, o lugares para un pequeño descanso (sin meterme en precios o calidad de lo que sirven. El Restaurante degli Archi y una terraza que me encontré en el camino.

Recomendaciones para dormir: tampoco puedo ofrecer consejo para alojamiento pues no nos quedamos aquí sino en San Quirico d’Orcia, pero Montepulciano ofrece muchas opciones para descansar antes de seguir con la ruta por la Toscana.

Recomendaciones para aparcar: Montepulciano es una localidad que cuenta con ZTL, por lo que no se puede entrar dentro. De todas formas, existen varios parking donde dejar por unas horas nuestro vehículo. Por poner un ejemplo, Piazza Don Minzoni 1,5€ la hora. Gratuito en el de la Via dell’Oriolo.

Recomendaciones para visitar en los alrededores: Pienza, Chianciano Terme, San Quirico d’Orcia, Bagno Vignoni, Cortona, Buonconvento, Lucignano.