Pavía, ciudad de los Sforza y los Visconti, fue fundada por ligures y celtas y posteriormente se convirtió en un municipio romano que recibía el nombre de Ticinum. Es una ciudad de agua suspendida entre el Ticino y el Po que marca y alimenta los arrozales de los que depende gran parte de la economía local.  Conocida por la «cittá delle cento torri», es también famosa por ser una de las ciudades universitarias más antiguas de Italia. Su centro histórico destaca por conservas vestigios de un pasado espléndido entre monumentos, calles adoquinadas y fachadas de un cálido color terracota.

1. CERTOSA DI PAVIA

La Certosa de Pavía es el edificio más importante de la ciudad y uno de los monumentos más bellos del Renacimiento. Está situada a las afueras, a unos 8 km de distancia, y fue construida en el S. XV como capilla familiar junto al Castillo Ducal por orden de Gian Galeazzo Visconti como ex-voto para su esposa Caterina por sus embarazos y partos muy difíciles. Acabó convirtiéndose también en un mausoleo tras su muerte siendo confiada más tarde a los monjes cartujos aunque con el paso del tiempo también pasaría a manos de cistercienses y benedictinos. Las tumbas de Gian Galeazzo Visconti y Ludovico il Moro son extraordinarias, dos verdaderas obras maestras aunque están vacías ya que Ludovico (quien acabó realmente la construcción del edificio tras la muerte de los anteriores) murió en Francia; también destaca el de Beatrice d’Este aunque su cuerpo descansa en Santa Maria delle Grazie en Milano. La fachada es renacentista con un suntuoso portal lleno de elementos también del Renacimiento lombardo. El interior es gótico, inspirado en la catedral de Milán, y rico en obras de arte como: un polittico del Perugino, el Retablo di Sant’Ambrogio del Bergognone y otro di Pinturicchio, la Madonna col Bambino del Guercino. No te pierdas el coro de madera del S. XVII. De admirar son los dos claustros: el Mayor y el Menor, con las celdas de los monjes y los arcos. La Certosa está flanqueada por el museo, promovido a finales del S. XIX por Luca Beltrami y la Galleria de Yeso que conserva los moldes de las esculturas renacentistas de la fachada y claustro, encargadas también por Beltrami con fines educativos y de conservación. Algunas salas tienen frescos (Studiolo y Oratorio del Priore) y pinturas de Vincenzo y Bernardino Campi Bergognone y Bernardino Luini.

2. DUOMO DI SANTO STEFANO MARTIRE E SANTA MARIA ASSUNTA

El Duomo di Santo Stefano Martire e Santa María Assunta es otro de los símbolos de la ciudad siendo importante en la historia del arte porque parece ser que fue utilizada por Bramante para «experimentar» lo que luego pondría en práctica a gran escala en la Basílica di San Pietro a Roma. Su cúpula, de planta octogonal y 92 m de altura, rivaliza en altura y anchura con esta y con la de Brunelleschi en Florencia. Su construcción comenzó en 1488 por encargo de Ascanio Sforza, hermano de Ludovico el Moro en el mismo lugar donde se encontraban las iglesias gemelas paleocristianas de Santo Stefano y Santa María. Y se podría decir que terminó hace relativamente puesto que los dos brazos del crucero se terminaron entre 1930-33. Problemas estructurales provocaron el derrumbe de la Torre Cívica en 1989 obligando su cierre hasta 2012. Su interior, de tres naves y capillas laterales, alberga el relicario de plata y cristal con tres espinas de la corona di Cristo encontrado en el año 327 por Santa Elena, madre del emperador Constantino. Desde 1645, durante la vigilia de Pentecostés, las espinas se bajan desde arriba y luego se llevan en procesión el lunes siguiente. Tampoco te pierdas la cripta diseñada por Bramante con los restos de San Siro, el primer obispo de Pavia. Observa atentamente el púlpito tallado en madera con los 12 apóstoles. Dignos de ver son también las pinturas del altar, donde incluso hay lienzos de Bernardino Luini y otro de Federico Faruffini. Como anécdota, no te pierdas en la misma Piazza Duomo la estatua a caballo del «Regisole», una copia del original destruido tras Revolución Francesa por ser un signo monárquico y que fascinó a Leonardo y Petrarca.

3. BASILICA DI SAN MICHELE MAGGIORE

La Basílica di San Michele Maggiore fue construida en el S. XI aunque sobre otro edificio anterior. Es de gran interés artístico porque es una obra maestra del estilo románico medieval. Tiene dos entradas, la principal y la del lado izquierdo, con portadas muy decoradas. Esta iglesia es una de las más importantes de la ciudad. Para su fachada se utilizó piedra arenisca de color ocre sustituyendo a la terracota usada frecuentemente en otros edificios de la ciudad. Ha sido escenario de numerosas coronaciones, la más conocida de las cuales, en 1155 cuando se coronó a Federico I Barbarossa, último emperador coronado en Pavia. El interior alberga frescos antiguos y maravillosos mosaicos, incluido uno antiguo en el suelo que data del S. XII.

4. PIAZZA DELLA VITTORIA

La Piazza della Vittoria, también llamada «Piazza Grande», es el principal lugar de encuentro de Pavía y está situado detrás del Duomo, en la intersección de las dos calles más importantes: Strada Nuova y Corso Cavour. Durante siglos, la plaza ha sido un mercado, que ahora es subterráneo, mientras que hoy es sobre todo un lugar de paseo para turistas y pavianos. Aquí podrás ver el Broletto, la ex chiesa di Santa Maria Gualtieri, la Casa Rossa (Domus rubea), la ex chiesa di San Nicolò della Moneta llamada así porque está cerca de la antigua Zecca (Casa de la Moneda).

5. BROLETTO

El Broletto fue construido en el S. XII como Palazzo Vescovile ordenado por el obispo San Damián, aunque actualmente es sede del Instituto Superiore Universitario. Toma su nombre de «brolo», que entre Véneto y Lombardía indica un huerto o una pequeña plaza con función de mercado. Domina la Piazza della Vittoria y durante siglos fue el palacio más importante de Pavía, además de ser el más antiguo de toda la Lombardía. En el palacio es visible la Madonna del Broletto, también conocida como Madonna del Popolo o «Madonna dal Pum». El edificio tiene un patio o loggia del S. XVI, donde se reunía la administración municipal como invitada del obispo. La estructura del edificio tenía inicialmente forma de herradura pero fue modificada a finales del S. XIII. Hoy se desarrolla alrededor del patio interior y tiene forma de cuadrilátero. El reloj que adorna la fachada es de 1872. El edificio ha tenido diversos usos a lo largo de su historia como: prisión, escuela de niñas, cámara de trabajo, Casa del Fascio o Scuola Media. En la actualidad, el edificio alberga exposiciones y está dividido en dos áreas: el Spazio Arti Contemporáneo inaugurado en 2007 que acoge artistas locales y el Spazio Immagine Design, inaugurado en 2017 que ofrece eventos dedicados a la multimedia y a la experimentación con las nuevas formas de expresión.

6. BASILICA DI SAN TEODORO

La Basílica di San Teodoro fue construida a mediados del S. XII. La fachada es de estilo románico lombarda de terracota. Destaca en su interior el magnífico ciclo sobre la vida de San Teodoro otro de Sant’Agnese y «La Veduta di Pavía», un fresco a vista de pájaro de Pavía del S. XVI donde se pueden ver muchísimas torres y donde se puede ver también el Ponte, el Castello el «Regisole» y otras iglesias existentes; de hecho, a Pavía la llamaban la «Cittá delle 100 Torri».

7. CHIESA DI SAN PIETRO IN CIEL D’ORO

La chiesa di San Pietro in Cielo d’Oro fue construido en el S. XII sobre una anterior del S. VIII. Su estilo es románico lombardo, por orden del rey lombardo Liutprando para albergar los restos di Sant’Agostino conservados hasta entonces en Cagliari. Está considerada, junto a la chiesa di San Michele Maggiore, como los dos edificios religiosos más importantes de Pavía. En el S. IX existía aquí un importante scriptorum y una escuela de gramática y retórica donde se conservaban  y copiaban códigos antiguos que transformaron San Pietro en uno de los centros culturales más importantes de Europa. Debe su nombre a la cúpula interior completamente dorada. Aquí descansan dos de los padres de la iglesia: Sant’Agostino, cuyo cuerpo se conserva en el presbiterio, concretamente en el Arca di Sant’Agostino, una obra maestra de mármol del S. XIII esculpida por Maestros de Como, la obra, gótica, está dividida en tres plantas: en la parte inferior la urna con los restos del Santo, en el centro la estatua de Sant’Agostino y en la parte superior la banda con columnas y chapiteles además de 150 esculturas que representan ángeles, santos y obispos y paneles que cuentan la vida del santo. También descansan allí los restos de Severino Boezio, filósofo y mártir, asesinado en este lugar en el año 525 por el rey ostrogodo Teodorico. Dante menciona la tumba en «Paradiso» (acostado en Cieldauro) colocando a Boezio entre los hombres que brillaron por su sabiduría cristiana.

8. CHIESA DI SANTA MARIA DEL CARMINE

La chiesa di Santa María del Carmine fue construida entre 1374 y 1461 por Gian Galeazzo Visconti y es una de las más grandes de Pavía, además de uno de los ejemplos más bellos de la arquitectura gótica lombarda. La imponente fachada, de inspiración románica, presenta decoraciones de estilo gótico lombardo. El interior es muy sugerente y cuenta con numerosas capillas laterales, ricas en frescos y pinturas. En el crucero, presta atención a las paredes con frescos del S. XV. También tienen un gran encanto el tabernáculo gótico y el altar del presbiterio.

9. CRIPTA DI SANT’EUSEBIO

La Cripta di Sant’Eusebio fue reconstruida en estilo románico a principios del S. XI sobre una anterior del S. VII pero demolida en el S. XX. Actualmente es lo que queda, recuperado de excavaciones y restauraciones. No te pierdas la portada pictórica románica del S. XIII, con clara impronta bizantina.

10. STRADA NUOVA

La Strada Nuova es la calle más famosa e importante de Pavía. Antiguamente fue el Cardo de la ciudad romana y todavía cruza la ciudad desde Ponte Coperto hasta el Castello durante más de un km. Subiendo la carretera, en un punto a la derecha, se entra en una elegante galería coronada por al Cúpula Arnaboldi, construida en hierro y cristal y con más de 32 m de altura, que le recordará las cúpulas que se encuentran en las galerías más famosas de Nápoles y Milán.

11. CASTELLO VISCONTI

El Castello Visconti fue construido en 1360 por orden de Galeazzo II. Es un grandioso palacio con cuatro torres, puente levadizo y foso que simboliza el poder, la riqueza y el refinamiento de los Visconti. Junto al castillo había un inmenso parque, del que hoy solo queda una parte, que conectaba el palacio con la Certosa. También se conectaba con Milán gracias al Navigliaccio, que todavía está, hoy en día, activo. Aquí también vivieron Gian Galeazzo y Filippo Maria. La riquísima biblioteca con 900 manuscritos iluminados fue saqueada por el rey de Francia Luis XII y parte del castillo fue destruido durante la famosa batalla de Pavía en 1525 entre el ejército francés y el de Carlo V que tuvo lugar en el mismo parque. El momento de la destrucción de las murallas está retratado en un cuadro de William Dermoyen que se encuentra en el Museo Capodimonte de Nápoles. En el interior del castillo, los techos de las habitaciones todavía están cubiertos de frescos antiguos, mientras que no queda nada de la biblioteca ni del mobiliario original. También merece la pena ver el hermoso patio y la refinada logia. Es sede de los Museos Cívicos (Museo Archeologico con la Sala Lombarda y sus preciosas obras de orfebrería, la reconstrucción de la sepulcral de Casteggio, el vidrio de la época romana; el Museo del Risorgimento, el Museo Medieval y Renacentista, el Museo Robecchi Bricchetti dedicado al explorador paviano) y alberga la Colección Malaspina, con obras maestras de la Scuola Véneta con artistas como Giovanni Bellini o Cima da Conegliano, además del famosísimo Ritratto d’uomo di Antonello da Messina, la Sacra Famiglia di Correggio pero también obras maestras francesas como Madonna con il Bambino de Hugo van der Goes, Madonna con Bambino di Giovanni Bellini el Retablo di Bottigella di Vincenzo Foppa y el Ritratto del re Francesco I di Francia de Jean Clouet. La parte más llamativa es la colección lombarda con la Pala Bottigella de Vincenzo Foppa y la Tavola con Cristo portacroce e i dieci certosini del Bergognone. No faltan obras del S. XIX, con artistas como Appiani, La di y Hayez y especialmente en la Colección Moroni con 66 pinturas de Zandomeneghi, Boldini, Pellizza da Volpedo y Giovanni Segantini.

12. PONTE COPERTO

El Ponte Coperto, al que también se le llama Ponte Vecchio, conecta las dos partes de Pavía: por un lado, el centro histórico y por el otro el Borgo Ticino. Es el resultado de las continuas reconstrucciones del primer puente romano que se construyó en tiempos de la época de Augusto. Este, tras derrumbarse, se reconstruyó en 1344 añadiéndose diez arcos y dos torres de defensa a los lados a las que Galeazzo II Visconti, dos siglos más tarde, hizo construir un magnífico tejado sostenido por cien pequeños pilares de granito. El puente sufrió graves daños durante los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial por lo que tuvo que ser demolido. El actual, de 200 m y cinco arcos, se reproduce siguiendo los dibujos del S. XIV. Es uno de los símbolos de la ciudad. Cuenta la leyenda que, en la Nochebuena del año 999, el diablo donó el oro del puente a cambio del alma de la primera persona que lo cruzara. El Arcangelo Michele, escondido entre los habitantes, dejó pasar una cabra salvando las almas de los habitantes. En memoria de aquel episodio, en el centro del puente se construyó una capilla dedicada a San Giovanni Nepomuceno, protector de los nadadores.

13. LAS TORRES

Como ya he dicho, a Pavía se la conoce como la «cittá delle 100 Torri», que fueron construidas en su mayor parte entre los Ss. XI y XII. No se sabe mucho sobre su función, pero considerando la ausencia de agujeros útiles para la defensa y decoraciones particulares, sugiere que debían realizar tareas principalmente simbólicas, representando el poder de la familia a la que pertenecían. Actualmente quedan cinco: tres en Piazza Leonardo da Vinci (la Torre del Maino de 51 m es la más alta y la Torre dell’Orologio de 40 m es otra) y dos en Via Luigia Porta.

14. UNIVERSITÁ DI PAVIA

La Università di Pavía fue fundada en 1361 siendo así la primera que se construyó en Lombardía y se encuentra entre las más antiguas del mundo aunque ya en el S. IX, Pavía fue sede de una importante escuela de retórica fundada por el emperador Lotario I. La estructura es muy grande y forman parte de ella edificios, patios, claustros y un jardín botánico con rosas y plantas medicinales, todo en un ambiente armonioso y tranquilo. En él hay un museo con instrumentos científicos medievales y una biblioteca con la espectacular «Sala Teresiana», un lugar que haría que incluso aquellos que nunca han leído nada quisieran hojear libros antiguos. También podrás visitar el Museo de Historia de la Universidad, con una exposición de instrumentos médicos y científicos que datan de la Edad Media. Es aquí donde están situadas tres de las cinco torres que quedan de todas las que tuvo la ciudad. Por aquí han pasado grandes nombres como Ugo Foscolo, Carlo Goldoni y Alessandro Volta y diversos premios Nobel, entre ellos Giulio Natta, Camillo Golgi y Carlo Rubbia.

15. BORGO TICINO

El Borgo Ticino, un pueblo colorido de pescadores, remeros y lavanderas que se encuentra a la izquierda del Ponte Coperto y que discurre a lo largo del río Ticino. A lo largo de los siglos ha mantenido inalterado este aspecto de pueblo costero, aunque hoy en día es sobre todo una zona residencial con cafés y restaurantes. El pueblo está atravesado por la Vía Francigena y aquí podrás ver la chiesa de Santa María en Betlem del S. XII. No te pierdas la casa del final de Via Milazzo donde podrás contemplar la escultura de una cara que saca la lengua a la que llaman «la Linguacciona». Se dice que fue colocada allí por un empresario para responder a las lavanderas que cotilleaban sobre su riqueza. Destaca también el Monumento alla Lavandaia, una escultura de bronce realizada en 1981 por Borgo Giovanni Scapolla que recuerda la larga tradición de lavar la ropa a orillas del río. Se dice que las lavanderas cantaban para pasar el tiempo y una de sus canciones favoritas era «la donna è mobile» de Rigoletto di Giuseppe Verdi.

16. CTRL + MUSEUM

El CTRL + Museum se encuentra en el interior de la antigua fábrica de algodón Dionigi Ghisio, que estuvo activa hasta la década de 1970. Es un museo que no te esperas, y está dedicado a la historia de la informática reuniendo una gran colección de software y hardware y de las tecnologías de la información. El proyecto se debe a la asociación comPVter APS y en el recorrido se exponen piezas de «arte moderno» tecnológico como el Commodore Pet, el Apple II o el Olivetti Notebook, pero también consolas, videojuegos y todo lo que pueda ser útil para promover la cultura de la historia de la tecnología. El museo solo se puede visitar con cita previa.

17. PARCO DELLA VERNAVOLA

El Parco della Vernavola es el Oasis verde de la ciudad y toma su nombre de uno de los afluentes del Ticino. Es un área protegida que alterna zonas agrícolas con prados y zonas boscosas. El parque se caracteriza por la presencia de una ruta botánica. Allí podrás ver animales salvajes como faisanes, zorros, abubillas y verderones, pero también patos, cisnes mudos, cisnes negros y algunas garzas reales y pollas de agua en un lago vallado.

18. ALREDEDORES

En los alrededores encontrarás castillos como el de Chignolo Po, el de Belgioioso, una residencia aristocrática con jardines neoclásicos y el Castello Sforza de Vigevano, con el Museo Internazionale della Calzatura donde podrás ver la Piazza Ducales, una de las más bellas del mundo en Vigevano. Otros pueblos en las cercanías son Porana, Zavattarello, Gravellona Lomellina conocida como «cittá dell’arte» por sus frescos y murales distribuidos por todo el pueblo y Fortunago. Inclusos balnearios como en Salice Terme, Rivanazzano o Mirándolo.

19. ACTIVIDADES EN EL AGUA

Por el río Ticino podrás pasear por su ribera o hacer excursiones en canoa o en barco a motor. También podrás descubrir el Naviglio Pavese que llega aquí desde la Porta Ticinese de Milán y cuya construcción duró nada menos que cinco siglos.

20. PLATOS RECOMENDADOS

Los platos que destacan de la Cocina Pavese son: todo tipo de platos con arroz, al que hoy en día se conoce como «oro bianco» desde que Galeazzo Maria Sforza lo trajo en el S. XV. De hecho, los arrozales de Pavía producen gran parte del arroz italiano marcando el paisaje. Destacan otros platos como «Risotto con le rane», «Zuppa allá Pavese» con pan, huevo crudo, caldo y queso; los «gnocchis con la zucca», los «agnolotti», y la «Panada», una sopa hecha con pan de molde cubierta con caldo caliente. Entre los postres, podrás probar la «Torta Paradiso», los «Dolci di San Siro» o incluso los «Ossa dei Morti». Destaca también el vino, como el espumoso Bonarda, el Oltrepò DOC, el Pinot Grigio o el Nero. Incluso embutidos como Varzi DOC o la Oca Ecuménica, pero también los de tradición Lombardo-Emilia.