Pamplona es una ciudad preciosa, verde. Esta es mi lista con los 20 motivos por lo que visitar la ciudad.
1. VISITAR EL CASCO ANTIGUO
En una ciudad con mucha historia, está claro que uno de los principales lugares a visitar, es su Casco Antiguo. Pasear por sus calles adoquinadas es como viajar en el tiempo, te ves rodeada de edificios que traspiran historia en cada rincón. Todavía conserva su trazado medieval que en su día estuvo formado por tres burgos: la Navarrería, San Cernin y San Nicolás. Estos tres barrios se unieron en 1423 cuando Carlos III el Noble dictó el Privilegio de la Unión. Unidas las tres, decidieron construir el Ayuntamiento justo en el centro, una especie de tierra de nadie.
2. AYUNTAMIENTO
El Ayuntamiento es uno de los lugares imprescindibles que ver en Pamplona y también uno de los edificios más emblemáticos de la ciudad, además de ser el más reconocido. Está situada en la Plaza Consistorial y fue construido entre 1753 y 1759 gracias al proyecto del maestro Juan Miguel de Goyeneta. Su fachada es de estilo barroco tardío además de neoclásico (es lo único que se conservó ya que el resto del edificio es de 1953). Cuenta con otros elementos arquitectónicos como la ornamentación de hojarasca, los elementos geométricos o los espejos de rocalla. Destacan los balcones y las estatuas que representan la Prudencia y la Justicia. En la parte superior del edificio aparecen dos Hércules que simbolizan las virtudes cívicas, y en lo alto del conjunto está la alegoría de la Fama, pregonera de los fastos de la ciudad. Es desde allí donde sale el Chupinazo para dar comienzo sus grandes fiestas: «Los Sanfermines».
3. PLAZA DEL CASTILLO
Un lugar que tiene que aparecer en esta lista es la Plaza del Castillo ya que es el epicentro de la vida en Pamplona. Recibe este nombre ya que antiguamente se levantaron aquí dos castillos. De hecho, la plaza era el mismo patio de armas. Con el paso del tiempo se convirtió en descampado, en plaza de toros, hasta lo que es ahora. La rodean edificios del S. XVIII con elementos como balconadas de madera entre los que destacan las fachadas del Palacio de Navarra, el Palacio Goyeneche y el Antiguo Casino además de su precioso quiosco central. También están aquí el Hotel La Perla (lugar que conserva todavía la habitación donde se alojaba Ernest Hemingway) y el Café Iruña, un bonito local con mobiliario original y con una estatua de este célebre escritor estadounidense.
4. CATEDRAL DE SANTA MARÍA LA REAL
Sin lugar a dudas, el edificio que destaca por encima del resto, es la Catedral de Santa María la Real. Fue construido entre los Ss. XIV y XV y mezcla a la perfección los estilos gótico, renacentista y neoclásico. Está considerado como el complejo catedralicio más completo que se conserva en España ya que conserva todavía el refectorio, la sala capitular y el dormitorio. Su fachada es neoclásica mientras que de estilo gótico son la sacristía, la sillería, las capillas, el coro, los sepulcros reales hechos con alabastro de Carlos III de Navarra apodado el Noble y Leonor I de Castilla pero, sobre todo, su magnífico claustro, perfectamente conservado y que además está considerado como uno de los mejores de Europa del S. XIV en el que podrás ver su delicada arquería y sus increíbles puertas: la Puerta Preciosa y la del Amparo. Si puedes, acércate a las 11:15 ya que podrás subir a la torre y ver la Campana María que pesa 10 toneladas (solo el badajo ya son 300 kg) además de disfrutar de las vistas de la ciudad Es la segunda campana más grande de España pero la primera que sigue en activo. También podrás ver la talla de Santa María la Real, románica del S. XII y la imagen mariana más antigua de las conservadas en Navarra y es de madera revestida de plata. El niño y el trono son añadidos de los Ss. XVII y XVIII respectivamente. Frente a ella se coronaban los reyes de Navarra. No te pierdas la Exposición Occidens con un recorrido por la historia y el desarrollo de la cultura occidental. Una actividad que podrán hacer los niños es La Catedral Infantil, una ruta de 10 paneles ubicados a la altura de los más pequeños donde se les muestra varios elementos litúrgicos y artísticos y donde tendrán que descubrir una campana escondida.
5. EL PALACIO ARZOBISPAL
El Palacio Arzobispal se sitúa en un lateral de la catedral, en la Plaza de Santa María la Real y era la antigua sede de la principal autoridad religiosa del antiguo reino. Fue construido entre 1732 y 1736 con estilo barroco. El edificio es de planta rectangular con las portadas churriguerescas diseñadas a modo de retablo. La hornacina de una de ellas guarda una imagen de San Fermín, patrono de la diócesis. Hoy en día, el edificio es sede administrativa episcopal, Archivo Diocesano y vivienda del arzobispo.
6. LA IGLESIA DE SAN LORENZO Y LA CAPILLA DE SAN FERMÍN
La iglesia de San Lorenzo es uno de los edificios religiosos más notorios de la ciudad. La fachada es de 1901 mientras que la Capilla de San Fermín, su elemento más valioso, fue construida entre 1696 y 1717 (exactamente el 6 de julio fue el día que se colocó la imagen del santo sobre el altar). La capilla es de estilo neoclásico mientras que la imagen, una talla de medio cuerpo, está realizada en madera y guarnecida en plata. Desde aquí sale la procesión de San Fermín cada 7 de julio (único día del año en el que el santo abandona la capilla).
7. LA IGLESIA DE SAN SATURNINO
La iglesia de San Saturnino, a la que también se le llama iglesia de San Cenin, está dedicada al co-patrono de la ciudad y es otra de las joyas de Pamplona. Fue construida en el S. XIII. Su fachada es de ladrillo y tiene un encanto románico aunque es un edificio gótico en el que destacan la portada (decorada con bonitas tallas) y el espacioso interior de la nave que tiene una capilla barroca que guarda la talla de la Virgen. Los elementos más importantes de esta iglesia son el atrio porticado y su veleta, conocida como el «Gallico de San Cenin», el emblema de la ciudad, que está colocado en la torre del campanario. San Saturnino fue el encargado de evangelizar las tierras paganas de Navarra y dicen que bautizó a unas cincuenta mil personas, entre ellas al propio San Fermín, con el agua de un pozo que había junto a la puerta. De hecho, una placa en el suelo homenajea al pocico.
8. LA IGLESIA DE SAN NICOLÁS
La iglesia de San Nicolás fue construida en el S. XII y sirvió de fortaleza protectora para los habitantes del barrio de San Nicolás como sus gruesos muros y las torres de vigilancia lo demuestran. En cambio, su interior es de estilo gótico. Alberga un gran órgano barroco, uno de los más importantes de Navarra además de retablos del S. XIV.
9. PALACIO REAL
El Palacio Real es la antigua residencia de diferentes reyes del Reino de Navarra además de obispos. Fue construido en el S. XII gracias al rey Sancho VI el Sabio pero debe su aspecto actual a la remodelación hecha por el arquitecto Rafael Moneo que dejó intacta la fachada original como también se dejaron las dos paredes interiores del S. XII, los pilares ochavados del S. XV y el escudo renacentista de los Austrias sobre la puerta de entrada. En su interior hay una maqueta de Pamplona del 1900 para saber cómo era el conjunto amurallado antes de su demolición. Tampoco te pierdas la Cripta románica abovedada, cuya sala permanece intacta desde hace 800 años ni el pozo de nieve medieval (cilíndrico y de 7 m de profundidad) en la parte trasera. El interior consta de seis tramos con bóveda de crucería y seis ventanas abocinadas que dan luz en el interior. Alberga en su interior el Archivo Real y General de Navarra desde 2003 donde se guardan documentos históricos desde el S. XII hasta la actualidad.
10. PALACIO DE NAVARRA
El Palacio de Navarra es una joya renacentista que ha sido testigo de importantes momentos históricos. Este edificio es sede del Gobierno Foral.
11. LAS MURALLAS
Las murallas, construidas en el S. XVI, son uno de los complejos defensivos medievales mejor conservados del país y uno de los símbolos representativos de la ciudad. Se considera Monumento Nacional y Bien de Interés Cultural. En su recorrido podrás ver baluartes, fuertes, revellines, contraguardias y portales (como el Portal de Zumalacárregui que es la mejor conservada de las seis que tenía la ciudad), además de ofrecer una de las vistas panorámicas más impresionantes que tiene Pamplona. Un lugar desde donde empezar a recorrerla podría ser la Ciudadela para así atravesar la Puerta del Socorro y la Puerta del Camino (ambas tienen escaleras para subir al paseo) para terminar con el Puente de Santa Engracia que las conecta con el Parque Taconera.
La Ciudadela se trata de una fortificación renacentista en forma de pentágono construida entre los Ss. XVI y XVII para uso militar y mandada construir por Felipe II gracias al ingeniero militar italiano Giacomo Palearo. En 1964 el espacio fue cedido al Ayuntamiento para transformarlo en un lugar de ocio para los pamploneses. Tiene fosos, baluartes, revellines, fortificaciones y más de 280000 m2 de zona verde, en definitiva, uno de los pulmones de la ciudad. En la actualidad se usa para actividades culturales, deportivas y de ocio.
Puedes entrar en el Centro de Interpretación de las Murallas que supone un buen punto de partida para comprender de manera ágil, didáctica e interactiva las murallas y las funciones de cada uno de sus elementos defensivos.
Otro punto para conocer la historia de las murallas, es el Centro de Interpretación de las Fortificaciones situado en el Fortín de San Bartolomé que ofrece toda la información necesaria para conocer las murallas y los elementos que las integran y entender la evolución de Pamplona a lo largo de los siglos. Permite conocer los principales acontecimientos que dejaron su impronta en la ciudad recreando las formas de vida y los testimonios de sus protagonistas.
Hay dos portales, el Portal de Zumalacárregui (o Portal de Francia) que es el mejor conservado de los seis que tuvo la ciudad, además de ser la puerta de entrada de los peregrinos del Camino de Santiago y la Puerta del Socorro, que fue erigida en 1689.
12. MUSEO DE NAVARRA
El Museo de Navarra se ubica en el antiguo hospital renacentista de Nuestra Señora de la Misericordia. Es un edificio de cuatro plantas que guarda toda la historia del Reino cuya fachada es renacentista. La colección del museo tiene obras de todas las etapas históricas: restos de arquitectura romana, los capiteles románicos de la antigua catedral de Pamplona, esculturas y orfebrería medieval… Destacan las ruinas de la primera catedral románica de la ciudad, un impresionante mosaico que representa el Triunfo de Bajo y que data del S. I, el Mapa de Abauntz, considerado como el más antiguo de los conocidos en Europa Occidental y la Arqueta de Leyre que está considerada como una de las joyas del arte islámico. Es de marfil de los años 1000. En la sección de pintura destacan las obras de artistas como Francisco de Goya o Jorge Oteiza u otros como Picasso, Kandinsky o Chillida.
13. MUSEO DEL VIOLINISTA PABLO SARASATE
El Museo del Violinista Pablo Sarasate lo alberga el Palacio del Condestable, el único edificio civil del S. XVI de la ciudad que se encuentra muy cerca de la iglesia de San Saturnino. Este museo rinde homenaje al violinista y compositor pamplonés. Alberga también la exposición con objetos personales del música y elementos audiovisuales que permiten conocer la vida del gran maestro.
14. PARQUE YAMAGUCHI
El Parque Yamaguchi fue diseñado por dos paisajistas japoneses al estilo de un jardín urbano japonés con juegos de agua, esculturas, plantas, árboles, casetas, puentes y hasta un palafito. Su intención era homenajear las cuatro estaciones y a la ciudad japonesa de Yamaguchi, hermanada con Pamplona. Dentro del parque se encuentra el Planetario de Pamplona con su gran cúpula y el Jardín de la Galaxia, una réplica vegetal a escala de la Vía Láctea.
15. JARDINES DE LA TACONERA
Los Jardines de la Taconera fue diseñado en 1830 y es un oasis en medio de Pamplona. Tiene un estilo romántico y versallesco. Podrás caminar entre magnolias hayas, acebos, laureles y una secuoya de 40 m de altura, además de ginkgos biloba y la sófora japónica combinada con fantásticas esculturas. En él también está el Monumento a Julián Gayarre, el Monumento a la Beneficencia, conocido como «La Mariblanca», o el Homenaje a Hilarión. Alberga un pequeño zoo en sus fosos con ciervos, patos, cisnes, pavos, faisanes, pavos reales… en estado de semilibertad. Otra cosa que podrás hacer allí es sentarte en el Café Vienés, un antiguo Kiosco de alquiler de bicicletas.
16. PARQUE FLUVIAL DEL RÍO ARGA
El Parque Fluvial del río Arga es un recorrido de 16 km que transcurre junto al río y pasa por una gran variedad de enclaves de lo más variopintos: puentes medievales, presas, molinos, embarcaderos, merenderos, huertas… Esta ruta está a una distancia de 5 min del Ayuntamiento. Este paseo se puede ampliar a 34 km continuando hacia Sorauren o hacia Ibero.
17. CENTRO DE INTERPRETACIÓN DEL CAMINO DE SANTIAGO
El Centro de Interpretación del Camino de Santiago-Ultreia es el centro de acogida al peregrino y en él podrás ver proyecciones audiovisuales y audioguías que te ayudarán a entender la gran influencia que el paso del Camino de Santiago ha tenido en Navarra.
18. RINCONES QUE NO TE PUEDES PERDER
Una de las plazas que no te puedes perder en Pamplona es la Plaza de San José. En ella está la Fuente de los Delfines, una fuente que es también farola. En esta plaza podrás también ver la puerta gótica de la catedral y la Museo del Violinista Pablo Sarasate, del que ya te he hablando en el apartado dedicado a él.
Otro rincón que no puedes perderte es el Paseo del Redín, una calle peatonal que bordea la muralla. En él destaca el paso entre dos casas, sobre elevado que usaban las monjas para ir desde el Convento de la Sierva a las casas sin ser vistas.
Pero el más importante de todos es el Mirador de Caballo Blanco. Se encuentra a poca distancia de la catedral y ofrece unas fabulosas vistas de la ciudad y del río Arga. Está ubicado sobre el Baluarte del Redín, el que estaba considerado como el mejor punto defensivo de la ciudad y el más accesible de todo el complejo amurallado. Allí mismo está el Palacio «El Caballo Blanco» que se erigió en 1961 utilizando las piedras y los elementos ornamentales del que fuera Palacio de Aguerre, derruido en la calle Nueva del Casco Antiguo. Aquí también se colocó la Cruz del Mentidero de la que solo queda la base y el fuste que, en realidad, era una picota, donde se ajusticiaba.
19. IR DE PINTXOS
Una de las cosas que no debes olvidar hacer es ir de Pintxos, las típicas tapas. Los más famosos son el Moskovita, el Erizo, el Ajoarriero de mi abuela, el Frito de Huevo o el Capricho de escombro.
20. SANFERMINES Y LOS TOROS
Una de las cosas más importantes para los pamploneses son los Sanfermines, una fiesta en la que toda la ciudad se para para vivir al máximo esa semana. Todo empieza con el chupinazo a las 12 del mediodía del 6 de julio que se lanza desde el Ayuntamiento y termina cantando a las 12 de la noche del día 14 el «Pobre de mí». Podrían ser las mismas fiestas que las de cualquier ciudad española, pero Ernest Hemingway las hizo internacionales. A él están dedicadas varias estatuas por toda la ciudad. Como en la plaza de toros, donde hay un busto suyo, en el Café La Perla que más arriba ya lo había mencionado, al igual que la habitación del hotel donde se hospedaba y que la han dejado igual en su memoria. Además de esta fiesta en julio, existe otra en septiembre llamada San Fermín Txikito, una versión más pequeña que está protagonizada por un pasacalles con cabezudos, comparsas y charangas.
¿Qué te parecería hacer el recorrido del encierro sin toros? Puedes empezar por la Cuesta Santo Domingo y la hornacina donde tienen la imagen de San Fermín, continuar en dirección al Ayuntamiento, seguir por la Curva de Mercaderes, llegar a la calle Estafeta, pasar por el Callejón y finalmente terminar en la Plaza de Toros. Este es un recorrido de unos 875 m que tú puedes hacer tranquilo o corriendo, tú decides, ya que no te viene nadie por detrás.
La Plaza de Toros está abierta al público y alberga algunas exposiciones. Incluso puedes hacer una visita guiada. Esta plaza fue diseñada por Francisco Urcola e inaugurada en 1922. Cerca de la puerta principal se encuentra el Monumento al Encierro, una escultura de bronce colado de Rafael Huerta que recrea un momento congelado de la carrera.
Otro lugar que tienes la opción de visitar es el Centro Temático del Encierro y los Sanfermines. Es un espacio dedicado a las tradiciones de la ciudad.
¿Te parecen suficientes motivos para conocer esta ciudad? Hay más, unos cuantos más, porque nunca se llega a conocer Pamplona. Siempre queda un rincón más a descubrir, una magia por contar, una tarde que pasar, un pintxo que degustar… Pero eso te lo dejo a ti para que me digas qué me puede haber faltado y no he descubierto…